Para tener éxito en los negocios, es necesario tener una mente ágil para reaccionar más rápidamente a los problemas y ser hábil para entender lo que se le presenta.
En resumen, tu capacidad para tener éxito está a menudo determinada por lo inteligente que seas.
Con la práctica, cualquiera puede aumentar su base de conocimientos, agudizar su intelecto y aprender nuevas habilidades.
Hay varias formas de potenciar tus habilidades cognitivas y ampliar tu capacidad mental.
Deberíamos intentar dedicar tiempo cada día a aprender algo nuevo.
Cuanto más aprendamos y más profundamente comprendamos, mejor podremos mejorar el rendimiento de nuestro cerebro y aumentar nuestra capacidad de aprendizaje.
La siguiente lista incluye las mejores formas de involucrar a tu mente y hacer crecer tu inteligencia para que puedas hacer frente a los retos cada vez mayores a los que te enfrentas.
Siguiendo estos consejos, puedes ser un poco más inteligente cada semana.
1. Dedica tiempo a la lectura diaria.
La mente es como un músculo: cuanto más la uses, más fuerte se hará.
La lectura es un elemento importante para desarrollar la mente, ya que es una de las formas básicas de adquirir conocimientos y aprender.
A través de la lectura, puedes descubrir cosas nuevas y formarte en cualquier tema. La lectura también ayuda a desarrollar tu lado creativo al hacer uso de tu imaginación.

Las palabras, tanto habladas como escritas, son los pilares de nuestra existencia social, y a través de ellas se puede ir a cualquier parte del mundo.
Si quieres aumentar rápidamente tus conocimientos, una forma fácil es acelerar tu lectura para poder cargar con libros, material escrito e incluso artículos en línea (¡como éste!).
La mayoría de las personas leen a un ritmo medio de 250 palabras por minuto. A ese ritmo, tardaría unos seis minutos en leer este artículo.
Pero con la lectura rápida, podrías reducir ese tiempo a la mitad.
Recuerda que el objetivo es ayudarte a consumir rápidamente más información, no a pasar por encima de las palabras sin comprender plenamente su significado.
2. Centrarse en la construcción de una comprensión más profunda.

Para ser más inteligente hace falta algo más que absorber información: la verdadera sabiduría proviene de la comprensión profunda de un tema.
Las personas con más éxito superan sistemáticamente a todos los demás porque son capaces de aprender rápidamente nuevas habilidades, adaptarse a los cambios y trabajar tanto en colaboración como de forma independiente.
Utilizan un conocimiento profundo y significativo de su mundo y una mentalidad flexible para entender los problemas y encontrar rápidamente soluciones.
Su profunda base de conocimientos les proporciona los fundamentos necesarios para actuar.
Trabajar para construir de forma constante una base de conocimientos profunda y significativa sobre unos pocos temas y cuestiones clave.
Sé sincero contigo mismo sobre las áreas en las que eres débil y trata de reforzar tu comprensión de los temas importantes hasta que tengas una base sólida sobre la que puedas construir.
El conocimiento es acumulativo, así que empieza por lo más básico.
Hay que saber cómo funciona algo antes de poder arreglarlo.
Es bueno tener amplios conocimientos, pero también es importante hacer «inmersiones profundas» para comprender realmente los temas difíciles y complejos.
3. Cuestiona constantemente y busca aclaraciones.

Hacer preguntas es el factor más importante para ser más inteligente. La innovación siempre empieza por hacer preguntas y ser curioso.
Hacer preguntas tiene su valor, porque es la forma de ampliar los límites de nuestro mundo y nuestra mente.
Por eso es tan importante perfeccionar una mente curiosa y abierta cuestionando constantemente todo.
No se trata sólo de hacer preguntas; hay que hacer preguntas perspicaces que prueben la validez de los supuestos, analicen la lógica y exploren lo desconocido.
Practica la formulación de preguntas que lleguen al corazón de un asunto y cultiva la voluntad de presionar para obtener respuestas.
Como todo, desarrollar esta habilidad lleva tiempo.
Mientras trabajas, lees o realizas actividades, lleva un registro de las preguntas que te vienen a la mente sobre cualquier cosa en la que estés involucrado. No tengas miedo de pedir aclaraciones cuando algo no esté claro.
4. Diversifica tu día.

Una de las mejores formas de aumentar tu inteligencia consiste en flexibilizar diferentes áreas de tu cerebro.
No vas a ser más inteligente haciendo lo mismo de siempre todos los días.
Aunque tener una rutina es algo bueno (para que tu cuerpo sepa cuándo debe levantarse y cuándo es la hora de acostarse), no quieres pasar tus horas de vigilia atrapado en la rutina.
Al introducir un poco de novedad en tu vida diaria, mantienes las cosas frescas e interesantes.
Eso puede significar ir a comer a un lugar nuevo, o dar un paseo a mediodía en el que se preste atención a las vistas y los sonidos que le rodean.
También puede mezclar las cosas durante las horas de trabajo, simplemente encontrando nuevas formas de realizar sus tareas cotidianas.
Si has estado trabajando durante un tiempo en una cosa, intenta cambiar a otra. Busque formas de hacer las cosas de forma ligeramente diferente.
Esto evitará el aburrimiento y ayudará a tu mente a mantenerse aguda y concentrada.
Al mezclar las cosas, utilizarás partes de tu cerebro de forma un poco diferente cada día.
Esto te ayuda a aumentar tu inteligencia al obligarte a flexibilizar tu capacidad cerebral de diferentes maneras piensa en esto como un entrenamiento general para tu cerebro.
5. Revisar la información aprendida.

Recordamos mejor la información nueva justo después de haberla aprendido.
Si no vuelves a utilizar esa información poco después de haberla aprendido, se desvanecerá rápidamente de tu mente.
Al cabo de unos días, es posible que sólo podamos recordar un poco de lo que aprendimos inicialmente.
Para aumentar nuestra capacidad de recordar, tenemos que almacenar esta información en nuestra memoria a largo plazo, y la mejor manera de hacerlo es repasar con frecuencia lo que hemos aprendido hasta que quede fijado en nuestros bancos de memoria.
Toma notas mientras lees o investigas algo, o tómate unos minutos cuando termines y escribe los puntos principales.
Dedica entonces unos minutos al día a repasar este material.
Requiere un poco de esfuerzo, pero una vez que se convierta en un hábito, se sorprenderá de lo bien que un rápido repaso de la información le ayudará a confirmar que la entiende, y a ver en qué áreas debe centrarse.
También puedes intentar reescribir la información o reorganizar tus notas, lo que reforzará activamente lo que has aprendido.
El acto de reescribir los apuntes nos ayuda a clarificar nuestra comprensión de un tema y reduce el tiempo que tardamos en «reaprenderlo» cuando necesitamos utilizar esos conocimientos en el futuro.
6. No pierdas de vista tus ideas.
A medida que trabajes para construir tu base de conocimientos, descubrirás que tu mente se expande y crece de nuevas maneras.
Si estás llenando tu cerebro con buena información, tu mente va a hacer lo suyo y va a empezar a interpretar esa información de forma útil.
Puede que descubras que de repente te has convertido en una máquina de ideas.

Empezarás a experimentar «momentos aha», esos pequeños avances en los que de repente conectas una idea con otra para formar una idea aún mayor y mejor.
Asegúrate de tomar nota de estas ideas. Anótalos, tenlos a mano y asegúrate de seguir consultándolos.
Recuerda que incluso tus mejores ideas son totalmente inútiles a menos que hagas algo con ellas.
Si tienes un golpe de genio pero pierdes el hilo de tus pensamientos y nunca vuelves a desarrollar esa idea o a perfeccionarla… ¡entonces acabas de perder una gran oportunidad!
No todas sus nuevas ideas van a ser ganadoras. Algunos pueden ser efímeros o simplemente no resultarán. Pero de vez en cuando, puedes tener un momento de luz que podría cambiar tu vida.
7. Permítase cambiar.
Nos demos cuenta o no, a veces nos frenamos a nosotros mismos.
Hay ocasiones en las que incluso las personas más inteligentes se dejan atar a ideas y formas de pensar obsoletas o erróneas.
Para llegar a ser verdaderamente inteligente, hay que permitirse cometer errores, arriesgarse y aprovechar las oportunidades y aprender de todas estas experiencias.

Debes permitirte cambiar, estar abierto a cosas nuevas y, en definitiva, convertirte en una versión diferente y mejor de ti mismo.
Al abrirte a nuevas fuentes de conocimiento y empujar tu mente a aprender cosas nuevas, puede que acabes cuestionando algunas de tus viejas ideas fundamentales.
Es posible que descubras que algunas de tus percepciones eran erróneas o que tus puntos de vista no estaban basados en los hechos.
Desafíe las ideas, discútalas con otros, escuche otros puntos de vista y flexione su capacidad de análisis.
Pero esté abierto a cambiar de opinión.
Y sobre todo, date espacio para crecer y continuar en tu camino de búsqueda de la sabiduría.
A medida que te vuelvas más inteligente, el éxito te seguirá.